sábado, 20 de septiembre de 2008

Se atrasa el festejo

Argentina tendrá que esperar para cerrar la serie de semifinal contra Rusia, ya que hoy Dmitry Tursunov e Igor Kunitsyn no solo cortaron el invicto de 16 partidos que llevaba sin perder David Nalbandian como local, sino que dejaron a 14 mil personas con las ganas del temprano grito final, tras vencer en un partido sufridísimo al conjunto local por 6-2, 6-1, 6-7 (9), 3-6 y 8-6.


La pareja argentina conformada por David Nalbandian y Guillermo Cañas salía al polvo de ladrillo a matar, para eso el capitan del equipo Mancini había decidido que el líder juegue este punto: con la intención de cerrar hoy la serie. Sin embargo todo se complicó cuando los rusos empezaron a pegarle sin presiones a la bola. Palazos por parte de Tursunov y angulos sorpresivos del lado de Kunitsyn dejaron a la dupla nacional sin respuestas, además del pobre tenis que mostraron en los primeros parciales.

En la tercera manga, cuando parecía que se levantaba un poco al tomar ventaja de 4-1 con chispazos de buen tenis se volvió a perder el saque y todo desencadenó en un tiebreak, desempate que sería determinante para la continuidad del juego. Los rusos contaron con una ventaja de 6-3 con dos saques en manos de Tursunov -el mejor sacador ruso- pero con dos winners tremendos de Willy Cañas se volvió al partido para luego salvar el match point restante con el servicio del cordobés. El hecho de ganar el tercer set de la manera que se lo ganó animó al conjunto local y a la gente que estaba sorprendida.
Luego de la levantada, el cuarto parcial encontró a Cañas y Nalbandian con un doble quiebre prematuro y la posibilidad de emparejar el partido para llevarlo a un quinto y definitivo set. Asi fue. El match se definió en el quinto. Argentina quebró rápido el servicio de Kunitsyn -que ya había sido doblegado en las anteriores ocasiones- para ponerse 3-1 y servicio de Cañas. Acá fue la clave de la derrota, una laguna de errores hizo perder dos veces seguidas el saque de los nuestros, y aunque luego se recuperó el quiebre anterior, nada puedieron hacer cuando se volvió a quebrar el servicio de Cañas y quedó la situación perfecta para los rusos: 7-6 y el servicio de Tursunov para cerrar el juego.

La situación es tensa. El partido se alargó mas de la cuenta sin resultados favorables para Argentina. Al contrario, el hecho de que se haya estirado el punto favorece por partida doble a los rusos, ya que David Nalbandian acumuló varias horas en cancha y mañana deberá salir a jugar el cuarto punto. De todas formas, el conjunto nacional sigue contando con la ventaja de 2 a 1 y la fe en llegar a la final sigue viva.


Romina Kosiner

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